La COVID-19 ha supuesto un antes y un después en las necesidades, hábitos y prioridades de la población. La búsqueda de mejores condiciones de vida, la desconexión y el valor de la experiencia se han catapultado como aspectos prioritarios tras la pandemia. Considerando estos atributos, Mallorca se perfila como un interesante destino para la inversión. La elevada diversificación y transformación de un modelo turístico vinculado a la sostenibilidad, además del incipiente desarrollo de otros sectores como el audiovisual, Life Sciences y transporte, profundamente ligados a los avances tecnológicos, suscitan cada vez un mayor interés.
Esto se pone de manifiesto por ejemplo al analizar el mercado inmobiliario que experimenta un aumento significativo de la demanda residencial, especialmente de vivienda en alquiler, tanto por parte de extranjeros como de habitantes locales. “La falta de suelo y futuro de la planificación urbanística ofrecen una oportunidad para la reconversión de activos hoteleros obsoletos o necesitados de reposicionamiento y en zonas más maduras y saturadas”, explicó Francisco Albertí, socio responsable de KPMG en Baleares. Una reflexión que se manifestó en la mesa redonda ‘Invertir en Mallorca’, organizada por KPMG y The Business Year, en la que se expusieron las oportunidades de inversión que determinarán el futuro de la economía mallorquina.
La isla representa un entorno favorable para la inversión inmobiliaria que, como destacó el socio responsable de Corporate Finance para el sector inmobiliario de KPMG en España, Ramón Gayol, “puede derivar hacia la oferta residencial y de productos de larga estancia o coliving e incluso a vivienda tasada y asequible”. A su vez, el Build to Rent se expande con suma rapidez en el mercado inmobiliario, asentándose como una de las principales fórmulas del sector. “La reconversión de edificios existentes, oficinas, hoteles y apartamentos situados en zonas maduras representan una opción cada vez más plausible para invertir en Mallorca”, indicó Ramón Gayol.
Por su parte, el mercado hotelero de lujo es otra de las oportunidades destacadas de inversión, así como la reconversión de nuevos productos y la entrada incipiente de grandes marcas internacionales. En este sentido, Juan Antonio Gutiérrez, CEO de Mazabi y Silicius, mencionó el alto interés en inversiones hoteleras para su reposicionamiento y el aumento de categoría en hoteles existentes en Mallorca.
Sin duda, el futuro del sector se dirige hacia un turista de mayor poder adquisitivo que busca experiencias de valor. Todo ello en un marco que promueve modelos más sostenibles que fomentan el cuidado del medio ambiente y la circularidad de la economía. Al respecto, Antonio Ballester, CEO de Estel Ingeniería y Obras, puso especial hincapié en el gran reto de “la transformación de los activos hoteleros en su estrategia de sostenibilidad y principios ESG”, así como las oportunidades que ofrece la economía circular y el reciclaje.
En este enclave, se destacó la apuesta por las energías renovables y, especialmente, la generación de hidrógeno verde, cuya aplicación podrá verse impulsada por los Fondos Next Generation EU. Según Antonio Ballester, esta nueva fuente de energía podría aplicarse al transporte público y a todos los retos que va a ofrecer la movilidad eléctrica.
“Mallorca ha sido un generador de industria auxiliar de la hostelería que ha acompañado a los inversores hoteleros mallorquines en su expansión exterior, además, se han conformado grupos líderes de la ingeniería de obras e instalaciones y de la generación energética”, apuntó. Y, sobre esta premisa, la innovación y la transformación digital sostienen un papel fundamental, pues como indicó Miguel Montero, socio de Transaction Services de KPMG en España, cada vez se observa una mayor presencia de nuevos ecosistemas de innovación, así como la creación de empresas tecnológicas y start ups, que serán cruciales para el desarrollo de dichos proyectos.
La pandemia ha propiciado nuevos patrones y hábitos de consumo, y uno de ellos tiene que ver con el despegue del entretenimiento. Un ‘boom’ que ha impactado especialmente en la esfera audiovisual. Sin ir más lejos, la altísima demanda de peticiones de rodajes, como ejemplificó Pedro Barbadillo, director gerente de Mallorca Film Comission, está abriendo un nuevo marco de posibilidades.
“Las oportunidades de inversión en la industria auxiliar audiovisual, de creación y posproducción, la industria de contenidos digitales o los sets de rodajes ofrecen una oportunidad de complementariedad económica al turismo. Incluso la mayor demanda del turismo cinematográfico está fomentando la desestacionalización”, constató Pedro Barbadillo.
La industria sanitaria y farmacéutica también se configuran como áreas en pleno desarrollo, pues gracias a la digitalización se encuentran inmersas en una profunda transformación de sus servicios. En palabras de Francisco Albertí: “surgirán oportunidades de inversión en torno a la investigación y la sanidad muy apoyadas por las Administraciones Públicas de cara al futuro”.
Por otro lado, la movilidad sostenible del territorio insular representa una oportunidad clave para el desarrollo de la red de comunicación, así como la optimización y la mejora del transporte público. Sobre esta premisa, la movilidad eléctrica se encuentra entre una de las prioridades para las Administraciones, lo que requerirá de una sólida colaboración público-privada.
Ahora bien, como refleja Miguel Montero, para aprovechar estas nuevas oportunidades de inversión será esencial asegurar un marco estable en materia de regulación, así como garantizar su viabilidad financiera. A tal fin, será de especial utilidad realizar un estudio previo que constante con seguridad la viabilidad de cualquier nueva inversión. Todo ello recurriendo a las áreas de Transaction Services y Corporate Finance, así como al acompañamiento legal y fiscal.
En línea generales, Mallorca se conforma como un entorno atractivo para la inversión, especialmente desde la perspectiva del sector inmobiliario, gracias a la diversificación de su modelo turístico tradicional. Una industria que se retroalimenta y establece nuevas sinergias entre sectores en pleno desarrollo como el audiovisual, innovación e investigación, o el transporte. Todo ello desde modelos que abogan por fórmulas más sostenibles y digitales que, sin duda, reposicionarán el futuro de la economía mallorquina.
Deja un comentario