En un entorno empresarial dinámico y en constante evolución, los CEO tienen la oportunidad de liderar y aprovechar las nuevas tendencias para impulsar la eficiencia y la competitividad de sus organizaciones. La rápida transformación tecnológica, los conflictos geopolíticos o los retos ESG no solo representan desafíos, sino también valiosas oportunidades para innovar y adaptarse a las nuevas demandas del mercado. Una realidad que se refleja en la décima edición del informe ‘KPMG CEO Outlook 2024’, que recoge la visión y las principales prioridades de más de 1.300 CEO de todo el mundo, 50 de ellos españoles, en su camino hacia la transformación.
Y es que los CEO españoles continúan manifestando su confianza en la evolución de la economía y el crecimiento de sus propias organizaciones. De hecho, tres de cada cuatro CEO españoles (76%) confían en el crecimiento de su empresa de cara a los próximos tres años y el 80% espera que la economía se expanda en ese mismo período. Este optimismo se refleja también en las previsiones de facturación: todos los encuestados prevén que sus ingresos aumenten en los próximos tres años y un 68% calcula que ese incremento será superior al 2,5%.
En esta línea, la práctica totalidad de los primeros ejecutivos españoles encuestados (98%) prevé incrementar sus equipos, ocho puntos porcentuales por encima de la pasada edición. Tal y como apunta Juanjo Cano, presidente de KPMG en España: “los primeros ejecutivos mantienen su compromiso con el empleo y afianzan el peso de los asuntos ESG y la IA generativa como palancas de crecimiento empresarial, poniendo siempre en el centro de sus estrategias a sus profesionales y considerando también al resto de grupos de interés”.
No obstante, los primeros ejecutivos no pierden de vista la complejidad que reviste el panorama económico actual y la necesidad de continuar impulsando y fortaleciendo sus palancas de crecimiento. Es por ello que, a partir de los resultados del estudio, se desgranan una serie de preguntas clave que los CEO necesitan replantearse para continuar impulsando su competitividad y posicionamiento en el mercado.
La apuesta por impulsar iniciativas ESG, la integración de la IA generativa y la adopción de medidas para hacer frente a posibles presiones inflacionarias e incrementos de costes representan las principales prioridades estratégicas para los primeros ejecutivos, según los resultados recabados en el estudio.
Aunque los CEO son conscientes de que estas palancas de crecimiento pueden verse alteradas por la elevada volatilidad del contexto, estos apuestan decididamente por el talento como máximo baluarte para responder ante los desafíos presentes y futuros. Todo ello poniendo el foco en el desarrollo de nuevas capacidades y habilidades, ante la transformación de sus organizaciones y, especialmente, ante la irrupción de la IA generativa.
La transferencia de conocimientos es fundamental para construir organizaciones más ágiles y resilientes, especialmente en un momento en el que resulta clave extraer las oportunidades que traen consigo tecnologías como la IA. Y es que, sin ir más lejos, los CEO españoles apuestan decididamente por la implementación de la inteligencia artificial generativa. De hecho, el 60% de los primeros ejecutivos españoles afirma que invertirá en IA con independencia de la situación económica (64% en el conjunto de los países analizados). Todo ello sin perder de vista los riesgos que trae consigo esta tecnología, así como el impacto que pueda suponer en la evolución del mercado de trabajo.
En consecuencia, el 80% de los CEO españoles descarta que esta tecnología vaya a reducir significativamente el número de puestos de trabajo (frente al 76% a escala global), aunque reconocen que conllevará la actualización y mejora de los conocimientos y capacidades de las plantillas. Por ello, las organizaciones necesitan continuar impulsando programas y acciones que ayuden a formar a sus profesionales y fomenten la comunicación intergeneracional.
A pesar de que los CEO están firmemente comprometidos con la digitalización y la transformación ESG, estas iniciativas solo se convertirán en auténticas oportunidades de crecimiento si las organizaciones logran maximizar el retorno de su inversión y toman decisiones estratégicas acertadas. De hecho, el 72% de los encuestados calcula que la inversión en IA no comenzará a dar frutos hasta dentro de al menos tres años. Así se extrae de los resultados del ‘KPMG CEO Outlook 2024’.
Por su parte, y en relación con los asuntos ESG, el 60% de los CEO reconoce que su organización no está preparada para responder con eficacia al mayor escrutinio de los grupos de interés. En este sentido, el tejido empresarial necesita poner el foco en aquellas cuestiones o áreas que requieran de mayor atención por parte de los equipos en materia de ESG. No solo ante el mayor escrutinio o el creciente impacto de la regulación, sino también como una transformación clave para sus agendas corporativas.
Los riesgos operacionales, la ciberseguridad y los problemas en las cadenas de suministro se encuentran entre los riesgos más destacados para los primeros ejecutivos españoles, junto con los riesgos reputacionales, lo que revela el impacto que está generando el mayor escrutinio de los grupos de interés en las estrategias corporativas, especialmente en materia de ESG.
De hecho, en el caso de que un área rentable de la organización generase un daño reputacional en la compañía, los CEO españoles no dudarían: un 84% de los encuestados en el sondeo desinvertirían en esa área.
Respecto a los riesgos relacionados con la transformación digital, las organizaciones no deben perder de vista la importancia de fortalecer sus sistemas de ciberseguridad, especialmente ante el rápido desarrollo de tecnologías como la IA generativa. Y es que, como afirma la mayoría de CEO españoles, construir una cultura en torno a la ciberseguridad es fundamental para integrar adecuadamente la IA en la organización.
En definitiva, y pese a enfrentarse a un entorno altamente complejo, los primeros ejecutivos españoles tienen claras sus prioridades en el corto y medio plazo. Depositan su confianza en las transformaciones digital y sostenible, y priorizan el valor de las personas como el activo más valioso para alcanzar sus objetivos presentes y futuros.
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