Sector teleco: el reto de las infraestructuras en un año clave

Las grandes operadoras de telecomunicaciones del país han bajado el telón del 2020, año marcado por la COVID 19, con la publicación de sus resultados anuales. En términos generales los operadores han visto decrecer sus ingresos por servicios, ventas de terminales y por roaming, consecuencia esto último de las restricciones a la movilidad internacional causadas por la pandemia, habiendo tenido en nuestro país un efecto especialmente relevante por el peso del sector turístico en la economía.

La COVID 19 no ha frenado las tendencias que ya se venían observando sobre los ingresos y la actividad comercial del sector, acelerando incluso algunas de ellas como consecuencia del impacto económico de la pandemia:

• Elevados niveles de portabilidades fijas y móviles: A pesar de la restricción al cambio de operador – impuesta desde el inicio del estado de alarma el 14 de marzo hasta finales de mayo de 2020 – con los tres principales operadores reportando cifras de portabilidad neta negativa y el cuarto operador del mercado capturando una parte relevante de las mismas. Según los datos reportados por la CNMC las portabilidades totales reportadas en 2020 ascienden a 8,9 millones (6,8 millones en móvil y 2,1 millones en fija) frente a los 9,5 millones reportados en 2019 (7,3 millones en móvil y 2,2 millones en fija).
• Crecimiento sostenido de los operadores convergentes, no controlados por los cuatro principales operadores: Posicionando de forma exitosa una oferta comercial convergente dirigida al denominado segmento “low end” mediante el acceso mayorista a fibra a precios no regulados. Este hecho ha permitido la irrupción de nuevos operadores en 2020 y la consolidación de uno de ellos como el sexto operador del mercado español con el consecuente impacto en la dinámica competitiva del sector.
• El inicio de la expansión a nivel nacional del principal operador de ámbito regional, que aun habiendo ofrecido históricamente una oferta convergente premium a su base tradicional de clientes, ha iniciado en 2020 de forma exitosa su expansión nacional como estrategia para contrarrestar el estancamiento de ingresos en sus actuales territorios de referencia.

Los acuerdos mayoristas de acceso a fibra a precios no regulados continuarán siendo en 2021 determinantes en la evolución futura de la dinámica competitiva del sector, especialmente si la rebaja del precio mayorista regulado de la NEBA dictaminado por la CNMC durante el mes de diciembre de 2020 se traslada también a los acuerdos de acceso a precios no regulados.

La atonía en la dinámica comercial del sector como consecuencia de la COVID 19 se ha visto compensada en 2020, y en el arranque  de 2021, con las operaciones ligadas a la estrategia de gestión de activos, tanto de las operadoras de telecomunicaciones como de los operadores neutros de infraestructuras, de cara a preparar el escenario del despliegue futuro de los activos ligados a la tecnología del 5G. En este aspecto cabría destacar lo siguiente:

• Operaciones de cesión de derechos sobre activos de fibra oscura, lo que ha permitido la concentración del mercado de esta tipología de fibra en España en dos compañías, con el reto estratégico de que ambas puedan incrementar el alcance de sus servicios apostando también por convertirse en operadores neutros para la gestión de activos FTTH.
• En el ámbito paneuropeo, España se ha convertido en uno de los epicentros en Europa en lo que a operaciones de configuración de grandes operadores de torres de telefonía móvil (TowerCo, en la jerga sectorial) .Se sigue así la tendencia de lo que ocurre en otros grandes mercados desarrollados como Estados Unidos. Cabe destacar aquí la irrupción en el mercado español y alemán de uno de los principales TowerCo independientes que hasta la fecha no gestionaba activos de relevancia a nivel europeo, y la decisión estratégica de las casas matrices del segundo y tercer operador de telecomunicaciones del mercado español de crear sendas TowerCos a nivel paneuropeo a las que sus filiales en España aportarán sus infraestructuras pasivas de torres móviles.

Durante 2021, y una vez se haya configurado una parte relevante del mapa de las TowerCo a nivel paneuropeo,  es probable que veamos movimientos similares en lo que respecta a las FiberCo para la gestión de activos FTTH. Cabe esperar que el mercado español también se convierta en un punto de referencia en este tipo de operaciones, dado el relevante esfuerzo inversor realizado a la fecha, así como por el compromiso de despliegues futuros de los principales operadores de telecomunicaciones  para que nuestro país continúe a la vanguardia de Europa en  cobertura de unidades inmobiliarias pasadas con FTTH .

Transformar el tejido empresarial desde la tecnología

Los próximos meses van a resultar cruciales en España para las compañías de telecomunicaciones, así como para los operadores neutros de infraestructura de cara a posicionarse adecuadamente ante la extraordinaria oportunidad abierta por el programa de inversiones basadas en fondos europeos de recuperación. Las compañías del sector van a cobrar un especial protagonismo en el desarrollo de dos de sus ejes principales: la Transformación Digital y la Cohesión Territorial y Social.

Sobre esta base, durante la segunda mitad de 2021 comenzarán a articularse proyectos de colaboración multi-empresa enfocados, entre otros ámbitos, a reducir la brecha digital de conectividad en pequeñas poblaciones, a acelerar el despliegue y adopción del 5G, a impulsar el desarrollo de soluciones de Internet de las Cosas en el contexto de “Smart Cities” o a potenciar la digitalización del tejido empresarial Pyme.

Sin duda estos  fondos europeos  van a constituir un nuevo escenario en el que el impacto de las infraestructuras de telecomunicaciones cobre si cabe un valor todavía más estratégico como uno de los pilares de crecimiento sostenible de la Unión Europea